-Adicional a lo que se ha escrito en varias oportunidades en este blog, referimos la acusación que un expolicía, Gómez Mazuera, hizo contra el Coronel Plazas en el año 2000. Se encontró no podía ser testigo de los hechos del Palacio de Justicia, porque no podía haber estado allí. El fue un policía que desertó de la institución y fue testigo, según él, de los crímenes contra los desaparecidos y estuvo en la cárcel por estafa. La Procuraduría de entonces, según resolución, se abstuvo de abrir investigación formal contra el personal de la 13 Brigada con este testimonio. Y aquí aparece el tenebroso cura jesuita y comunista Javier Giraldo que le paga pasaje al Brasil, luego a Alemania y a Bruselas, donde casualmente, ejercía como Secretario de la Embajada de Colombia, Gustavo Petro. En el 2005 este cura renueva el caso del Coronel Plazas ante el fiscal Iguarán, quien lo filtra a sus amigos de la Revista Semana y El Tiempo. Sacan a la luz pública este caso que estaba cerrado, dando por cierto el testimonio de el expolicía. El Coronel les pide una rectificación, haciendo llegar la Resolución de la Procuraduría y la de un juez que dispuso la rectificación. No lo hicieron. Su abogado Humberto de la Calle, apeló con la tesis: " siendo el Coronel Plazas una figura pública, podía ser calunniado por la revista Semana". La Justicia acogió este esperpento y no rectificaron. Por estas calunnias ha sido condenado el Coronel, por unos hechos en los que él no tuvo nada que ver, pues su intervención en el Palacio de Justicia fue únicamente operacional. De los desaparecidos y otros testigos falsos ya lo hemos comentado en este blog, en varias oportunidades. Al Dr. De la Calle Lombana, a la revista filocomunista Semana, Colprensa y otros, debemos felicitarlos por el daño enorme que le han hecho a la familia del Coronel y a la Sociedad colombiana. En cuanto a Gómez Mazuera, vive desde 1989 en Europa por cuenta de una ONG asociada a la Intereclesial Justicia y Paz del cura comunista, jesuita, Javier Giraldo. Este cura fue denunciado por el Coronel y la fiscalía llamó a Gómez Mazuera para que ratificara la acusación en Bruselas y no asistió dizque por razones de seguridad. Lo mismo el cura Giraldo, no por razones de seguridad, sino porque no le da la gana. Cree en la Justicia si se trata de condenar a un militar honesto y cumplidor de su deber, pero él no se cree obligado a comparecer ante ella. En el 2007 nuevamente arremete contra el Coronel con la colaboración de ongs europeas, comunistas también. Gómez Mazuera nunca se ha presentado ante una autoridad judicial, ni lo va a hacer. Y en el 2008 aparece otra versión falsa, la del cabo Edgar Villamizar, o Villamil, o quien sea. Un testigo que la Defensa del Coronel no conoce y nadie en el país .Una fiscal Angela Buitrago la acoge, descarta la acusación del expolicía y acepta, además, como ciertos, los testimonios de algunos familiares de desaparecidos que ven, o creen ver, en los videos que el mismo Coronel entregó a los jueces, voluntariamente y no como lo presentaron los medios: "en allanamiento fueron encontrados unos videos que comprometen al Coronel con los desaparecidos". Todo un montaje orquestado por la fiscal y el sujeto Guarín Cortés , abogado de las supuestas víctimas, entre ellas la de su hermana, la también abogada, empleada humilde de la cafetería, según él, y que resultó haber sido guerrillero del M-19, terrorista, secuestrador, asaltante de bancos y también expresidiario. Todos los medios de comunicación, el Colectivo de Abogados Alvear Restrepo, mienten, o mejor, callan las mentiras, en lo que mi opinión constituye una verguenza, una más, de nuestra justicia. Con base en todas estas mentiras una fiscal, Angela María Buitrago, hoy en Alemania, seguramente por cuenta de una ONG mamerta, lo condena a 30 años.
-Adicional a lo que se ha escrito en varias oportunidades en este blog, referimos la acusación que un expolicía, Gómez Mazuera, hizo contra el Coronel Plazas en el año 2000. Se encontró no podía ser testigo de los hechos del Palacio de Justicia, porque no podía haber estado allí. El fue un policía que desertó de la institución y fue testigo, según él, de los crímenes contra los desaparecidos y estuvo en la cárcel por estafa. La Procuraduría de entonces, según resolución, se abstuvo de abrir investigación formal contra el personal de la 13 Brigada con este testimonio. Y aquí aparece el tenebroso cura jesuita y comunista Javier Giraldo que le paga pasaje al Brasil, luego a Alemania y a Bruselas, donde casualmente, ejercía como Secretario de la Embajada de Colombia, Gustavo Petro. En el 2005 este cura renueva el caso del Coronel Plazas ante el fiscal Iguarán, quien lo filtra a sus amigos de la Revista Semana y El Tiempo. Sacan a la luz pública este caso que estaba cerrado, dando por cierto el testimonio de el expolicía. El Coronel les pide una rectificación, haciendo llegar la Resolución de la Procuraduría y la de un juez que dispuso la rectificación. No lo hicieron. Su abogado Humberto de la Calle, apeló con la tesis: " siendo el Coronel Plazas una figura pública, podía ser calunniado por la revista Semana". La Justicia acogió este esperpento y no rectificaron. Por estas calunnias ha sido condenado el Coronel, por unos hechos en los que él no tuvo nada que ver, pues su intervención en el Palacio de Justicia fue únicamente operacional. De los desaparecidos y otros testigos falsos ya lo hemos comentado en este blog, en varias oportunidades. Al Dr. De la Calle Lombana, a la revista filocomunista Semana, Colprensa y otros, debemos felicitarlos por el daño enorme que le han hecho a la familia del Coronel y a la Sociedad colombiana. En cuanto a Gómez Mazuera, vive desde 1989 en Europa por cuenta de una ONG asociada a la Intereclesial Justicia y Paz del cura comunista, jesuita, Javier Giraldo. Este cura fue denunciado por el Coronel y la fiscalía llamó a Gómez Mazuera para que ratificara la acusación en Bruselas y no asistió dizque por razones de seguridad. Lo mismo el cura Giraldo, no por razones de seguridad, sino porque no le da la gana. Cree en la Justicia si se trata de condenar a un militar honesto y cumplidor de su deber, pero él no se cree obligado a comparecer ante ella. En el 2007 nuevamente arremete contra el Coronel con la colaboración de ongs europeas, comunistas también. Gómez Mazuera nunca se ha presentado ante una autoridad judicial, ni lo va a hacer. Y en el 2008 aparece otra versión falsa, la del cabo Edgar Villamizar, o Villamil, o quien sea. Un testigo que la Defensa del Coronel no conoce y nadie en el país .Una fiscal Angela Buitrago la acoge, descarta la acusación del expolicía y acepta, además, como ciertos, los testimonios de algunos familiares de desaparecidos que ven, o creen ver, en los videos que el mismo Coronel entregó a los jueces, voluntariamente y no como lo presentaron los medios: "en allanamiento fueron encontrados unos videos que comprometen al Coronel con los desaparecidos". Todo un montaje orquestado por la fiscal y el sujeto Guarín Cortés , abogado de las supuestas víctimas, entre ellas la de su hermana, la también abogada, empleada humilde de la cafetería, según él, y que resultó haber sido guerrillero del M-19, terrorista, secuestrador, asaltante de bancos y también expresidiario. Todos los medios de comunicación, el Colectivo de Abogados Alvear Restrepo, mienten, o mejor, callan las mentiras, en lo que mi opinión constituye una verguenza, una más, de nuestra justicia. Con base en todas estas mentiras una fiscal, Angela María Buitrago, hoy en Alemania, seguramente por cuenta de una ONG mamerta, lo condena a 30 años.
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