-Edelsio querido, te perdiste, me hiciste mucha falta, extrañé tus mordaces artículos sobre lo divino y lo humano. Ha sido más por timidez que por falta de tiempo, no te he escrito contando de mi ensañamiento y apasionamiento por tì, puerco-chovinista, que de hecho me provoca espasmos de amor. Es por eso que te propongo, por ser urgente, cabalgar en mi dorso indefenso, tal cual los potros del apocalipsis. Ay, mi Edelsio, que rico sería.....como te guste, yo gusto, mi capataz. Sin ti yo serìa Hamlet sin Ofelia, un barco a la deriva, elecciones sin fraude, el Amazonas sin el Vaupès. Por eso ven, Edelsio. Desactiva en esta loca la voluntad incoherente, mórbida y doliente de lamer tu piel morena, reaccionaria. No desistas, si no en tanto, por insuficiente, mi selva no abriga bien tu saña devastadora, este verde que te ofrezco será presa fácil para tus sueños dorados. Me haces tu sierva y me expones de norte a sur, matando mi anhelo de que succiones mi nectar, mi mineral. Multinacionalizate en este territorio pegajoso de esta tu negra que a ti se ofrece sin reservas. Juntos tañiremos intenciones exóticas sin obstáculos a nuestro consenso. Estoy inquieta a la espera de tus inversiones para canalizarlas a mis royalties. Como Colombia te reclamo llorosa, inquieta, golpeada.....ven Tavares....macartiza mi conciencia noble e insulta mi inteligencia quejumbrosa. No conjetures, no tapes el sol con un cedazo.....ven, Lucía , la del río Negro.Guayuriba, tu sabes...en La Unión, . . .ven.
-E.P.Ed. Muy agradecido, no respondí antes, estuve en Río, que es de Janeiro y del año entero. Nunca he rehusado ofertas así. Tu carta Lucía la del Río, fue como una patada de burro, me llegó. Hace frío hoy, el clima me excita. Sexualmente me gustaría rodar contigo como ruedan las piedras que arrastra el Río Negro, ahí en La unión. No quiero escamotear esta mi naturaleza indomable. No soy más fuerte que tu, mujer, los dos precisamos uno de otro. Soy de las personas que gustan llevar golpes de la amada en la cara en la hora de alcanzar el clímax y de insultarla en italiano. Soy un sexopolíglota. Gusto de mujeres como tu que solo piensan en sexo el día entero. Una vez entendidas estas premisas básicas de la condición humana es fácil partir para este encuentro que será pronto; más fácil que interpretar a Juanpa, el traidor. Resulta difícil mantener una erección pensando en este sujeto que hoy nos mal gobierna. Después de copular y con los instintos bestiales saciados, es que se puede pensar en hacer algo correcto. Por eso es que mi respuesta es larga y dejo así clara mi posición. Entonces resolveré pronto el negocio que nos ocupa, mi amor. lo haremos en la cama y después iremos a emborracharnos. Pido perdón por el excesivo espacio ocupado. Prometo, parafraseando a Dostovieski, conmigo toda tu Anatomía será bien escudriñada
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