En contra del mejor Ministro de Agricultura de los últimos tiempos, Andrés Felipe Arias. Sigue la violencia jurídica contra el uribismo, contra un hombre ejemplar, honesto, en la que su equipo de asesores, todos ellos en la cárcel, se pudieron haber equivocado en una apreciación jurídica: contratar con el IICA, asesor desde hace 40 años del gobierno en asuntos agrícolas, y no hacer licitación pública. Esto es, se cometió un peculado a favor del IICA, entidad que no tiene fines de lucro. Igual lo estimó el procurador delegado ante la CSJ, personaje cercano a Maya Villazón, Heider Patiño, que puso tambien su cuota de odio, aún cuando reconoce no hay dolo, no se robaron nada, no se enriquecieron ilícitamente, ellos ni terceros, no tuvieron nada que ver en el fraccionamiento que hicieron de sus predios unos avivatos en el departamento del Magdalena, 5 familias, que, a propósito, devolvieron el dinero que habían recibido, en un monto aproximado del 3 % de los recursos, en un proyecto para riego y drenaje. El proyecto se hizo, con los dineros, incluso propios de las familias Dávila y Vives. Ellos gozan de libertad y los funcionarios del Ministerio en la cárcel. Es un escándalo de corrupción en que no se pierde un peso. Y nadie habla de las 326 mil familias campesinas que se beneficiaron con el programa AIS, ganaderos, productores de aceite de palma, caucho, maíz, sorgo, biocombustibles, floricultores, empresarios grandes y medianos del campo, gente responsable en casi un 40 % de los empleos en el sector agrícola, empresarios pequeños en proyectos de cafe, forestación, pesca, etc. La frontera agrícola del país se incrementó en un millón de hectáreas y gracias a eso no hubo casi incrementos en los precios de los alimentos en 3 años. Exportamos leche, pollo, huevos, carne, etc, a Venezuela y Centro America. Cerca de un millón trescientos mil colombianos fueron los beneficiaros directos del programa . Cómo le pagamos a ese equipo de técnicos ?: con la pérdida de su libertad y de sus derechos políticos. Mejor hubiera sido no hacer nada, como se hizo desde siempre en esa cartera, no desarrollar grandes proyectos, hacer muy poco, no tomar riesgos, tal como lo hace el actual ministro, JCR, un buen burócrata, que ya nos dijo no concederá créditos sino a pequeños propietarios, a esos que, en minifundios, producen escasamente para su familia, esos que no generan empleos y que tienen dificultades para pagar, esos a los que los bancos no dan créditos. Qué va a pasar? violencia económica, desplazamiento de campesinos a las ciudades, incremento de los cultivos ilícitos, informalidad general en el campo. Y vale pena señalar algunas perlas de esa fiscal cristiana que tenemos, cuyo esposo,( o amante?), Carlos Alonso Lucio, criminal indultado de ese grupo que asesinó a magistrados de la corte y secuestró a colombianos de bien: Hay que meter en la cárcel a Arias porque representa un peligro para la sociedad.( Debe ser más peligroso que su esposo). Que con su dinero puede entorpecer la acción judicial, y porque con las visitas a sus amigos y compañeros presos en La Picota, puede obstruír la justicia; cuando se sabe que todos ellos ya hicieron sus descargos ante los jueces. No le gusta el abogado de Arias, pues fue el que condenó a su esposo ( o amigo sentimental?), Carlos A. Lucio, el exmagistrado Jorge Anibal Gómez, al que calificó de torpe cuando, a los primeros acusados del proyecto AIS, la juez los envió a la cárcel, pues eran tambien elementos peligrosísimos para la sociedad. Otra perla: le cumplí al país. Y no olvidemos que ella defendió a Ernesto Samper, en conjunto con el exfiscal Gómez Méndez, cuando ese sujeto consiguió elegirse presidente con los dineros del Cartel de Cali. Esto me suena a revancha y venganza contra el presidente Alvaro Uribe.
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