CARTAS

-Reficar: En 2001, en el gobierno de Pastrana, se establece como necesaria la expansión de la refinería de Cartagena. En 2002, con Alvaro Uribe, Ecopetrol no tiene el dinero, ofrece el 51 % de las acciones de reficar; Petrobras y Glencore compiten, ésta última ofrece 40 millones de dólares más. Arranca en 2008, poco después entra en crisis, dice que no puede efectuar el contrato, Ecopetrol recompra a un menor valor el proyecto, revisa diseños y firman un contrato con una firma de Chicago por US$ 3.900 millones, el diseño se termina en el 2o semestre de 2010. La ejecución comienza en 2011, con el gobierno de Juan Hampa y es el que inaugura a Reficar, con gran bombo, sin mencionar, claro está, a su predecesor, para qué? ya lo hemos visto haciendo igual en otras obras. Pero, ay, horror, ala, carachas, para este orejón mentiroso, las adiciones al presupuesto original se duplican a 8.000 millones de dólares, lo dice el contralor, su amigo. Pero no se detiene, dice que fue  Uribe. Miente. El único Ministro de Minas que tuvo Uribe fue Hernán Martínez quien es el que resume lo expuesto aquí. Los responsables de las adiciones al presupuesto original se reparten entre los cinco, óigase bien, 5 ministros de Minas de Juanpa: Rodado, Cárdenas, Rengifo, Amilcar y Gonzáles. El pecado original lo tiene este gobierno, el que tiene que justificar su corrupción, la cual equivale a 4 veces más lo recibido por Isagen, Anselmo, Ubaque.
-Plinio y Thania Vega: A los militares colombianos no se les aplica su presunción de inocencia, al contrario tienen la presunción de culpabilidad, deben probar que son inocentes, se les investiga con procesos eternos, más de 8 años en el caso del Coronel Plazas Vega, y son también condenados por su posición de jerarquía, Generales, Mayores...Rito Alejo del Río, preso por un muerto que no conocía, lejos de su jurisdicción, al que no mató, ni ordenó matarlo; el General Uzcátegui con lo de Mapiripán que no estaba en su jurisdicción, condenado por muertos que no existen o militan en las farc y así, miles de miembros de nuestra fuerza pública, condenados por operadores judiciales con sesgo político, con falsos testigos, criminales a los que les dan beneficios jurídicos. Hay 500 militares presos en cárceles comunes, expuestos en su honra, junto a los criminales que combatieron. Pero ahora con la justicia transicional, la que se aprobó en La Habana con beneplácito de las farc, se enfrentan a una situación diabólica en que, si se reconocen culpables, en esta justicia, así con minúsculas, se les dan penas menores, equivalentes, o un poco más altas, que a los responsables de las farc, ellos si condenados por crímenes de lesa humanidad, no faltaba más, pero si insisten en su inocencia, siendo inocentes, se les demorarán sus juicios y se les condenará como a Plazas Vega, a 20 años, sea por esos jueces sesgados, de la izquierda europea, socialistas siglo 21, sus enemigos. Muchos militares lo harán, sin embargo, obviamente quieren estar con sus esposas, su familia, pero se equivocan, en Guatemala, recientemente, detuvieron a 14 militares, no se les respetó el convenio que hubo. Igualmente, en Argentina, los que se enfrentaron a los Montoneros y los vencieron, los gobiernos de la izquierda populista se olvidaron de las leyes de punto final, los juzgaron de nuevo y muchos de ellos, ancianos, mueren en las cárceles, como Videla, el que fue presidente. Los militares no se pueden acoger, no pueden creer en promesas de una justicia de afuera infiltrada por sus enemigos, los comunistas, los socialistas siglo 21, la fiscalía y los jueces mamertos,

estos sí nuestros