-En este caso de los ataques por parte del cura jesuita a Uribe y del encubrimiento que hace la curia y los provinciales de la compañìa de Jesus, la reputaciòn de la iglesia sale mal librada y la de sus jerarcas mediocres y encubridores, responsables de que la corrupciòn sea tan abundante dentro de la Iglesia catòlica. Y quiero citar un caso aberrante de como la iglesia actùa con los sacerdotes que abusan sexualmente de menores.
Pepe Rodriguez en su libro "Pederastia en la iglesia catòlica" señala el caso de ENRIQUE DIAZ JIMENEZ, que abusò sexualmente, al menos, de 80 menores, en Venezuela, Estados Unidos y Colombia, en las diòcesis de Vargas, donde abusò de 18 niños que preparaba para recibir la primera comuniòn. Y a pesar del escàndalo lo transladan a la diòcesis de Queens y Brooklin, donde siguiò abusando de niños. Fuè deportado de allì nuevamente a Venezuela tra ser encontrado culpable de abuso sexual de 3 monaguillos y de acosar a 60 màs. La iglesia lo acogiò nuevamente y lo mandò a Punta Mulatos, en La Guaira, pero no aminorò allì su ardor sexual y fuè denunciado por varios de sus alunnos por forzarlos a tener sexo oral y luego fuè trasladado ATERRENSE, a la parroquia de Marìa Auxiliadora de los Cristianos en Ciudad Montes, al sur de Bogotà, donde tengo unos amigos, cristianos ellos, con hijos menores, donde tambièn acabaron por denunciarle por el abuso sexual de sus hijos. El 22 de Enero del 2002 aceptò una sentencia anticipada por un delito de acceso carnal abusivo con un menor de 14 años y condenado a 53 meses de arresto domiciliario en un lugar donde al ser detenido, convivìa con un menor de edad.
No es esta una conducta inaceptable de encubrimiento del clero para con este sacerdote colombiano?. Una iglesia que oculta sus delitos y lo translada de una parroquia a otra, argumentando su derecho a la intimidad. Y donde quedan los derechos que tienen sus vìctimas?
Si la iglesia encubre a un delincuente de estos, por què no callarse ante las mentiras y calumnias que hace este falsario, pèsimo cura, y peor ser humano, el padre Jesuita Giraldo, desde la comunidad de paz de Apartadò.
Si alguno de ustedes conoce del paradero de este cura depravado, es su deber denunciarlo, por lo menos a este blog.
Pepe Rodriguez en su libro "Pederastia en la iglesia catòlica" señala el caso de ENRIQUE DIAZ JIMENEZ, que abusò sexualmente, al menos, de 80 menores, en Venezuela, Estados Unidos y Colombia, en las diòcesis de Vargas, donde abusò de 18 niños que preparaba para recibir la primera comuniòn. Y a pesar del escàndalo lo transladan a la diòcesis de Queens y Brooklin, donde siguiò abusando de niños. Fuè deportado de allì nuevamente a Venezuela tra ser encontrado culpable de abuso sexual de 3 monaguillos y de acosar a 60 màs. La iglesia lo acogiò nuevamente y lo mandò a Punta Mulatos, en La Guaira, pero no aminorò allì su ardor sexual y fuè denunciado por varios de sus alunnos por forzarlos a tener sexo oral y luego fuè trasladado ATERRENSE, a la parroquia de Marìa Auxiliadora de los Cristianos en Ciudad Montes, al sur de Bogotà, donde tengo unos amigos, cristianos ellos, con hijos menores, donde tambièn acabaron por denunciarle por el abuso sexual de sus hijos. El 22 de Enero del 2002 aceptò una sentencia anticipada por un delito de acceso carnal abusivo con un menor de 14 años y condenado a 53 meses de arresto domiciliario en un lugar donde al ser detenido, convivìa con un menor de edad.
No es esta una conducta inaceptable de encubrimiento del clero para con este sacerdote colombiano?. Una iglesia que oculta sus delitos y lo translada de una parroquia a otra, argumentando su derecho a la intimidad. Y donde quedan los derechos que tienen sus vìctimas?
Si la iglesia encubre a un delincuente de estos, por què no callarse ante las mentiras y calumnias que hace este falsario, pèsimo cura, y peor ser humano, el padre Jesuita Giraldo, desde la comunidad de paz de Apartadò.
Si alguno de ustedes conoce del paradero de este cura depravado, es su deber denunciarlo, por lo menos a este blog.
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